PLATAFORMAS DE CUIDADOS, APROXIMACIONES A LA NECESIDAD
A lo largo de las conversaciones sobre la digitalización de los cuidados los entrevistados y entrevistadas hacen referencia a cuestiones como las previsiones demográficas, la insuficiencia de recursos del sistema de bienestar social, la necesidad de mejorar la prevención sanitaria y la calidad de vida durante el envejecimiento, el coste de los cuidados para las familias, etc. ¿Tienen fundamento? Creemos que sí, pero vamos a verlo en detalle a través de diez puntos clave.
- PREVISIONES DEMOGRAFICAS
Los mayores de 80 se han multiplicado por 2 desde 1998, y según las proyecciones actuales, su número seguirá aumentando hasta 2060. Si tomamos como referencia 2050, en España habrá 5.771.900 personas mayores de 80 años, casi se doblará la cifra actual. Lo mismo podría suceder con la dependencia de este colectivo, como se aprecia en el siguiente gráfico, donde incorporamos dos evoluciones, la demanda por dependencia, y la de cobertura estimada de la dependencia, de acuerdo con las trayectorias anteriores. Se necesitarán recursos suplementarios para acercarlas.

- SOLEDAD: HOGARES UNIFAMILIARES DE PERSONAS MAYORES
1.820.000 personas de más de 65 años viven solas en España (en 2021). Son el 24% de las mayores de 65. Aunque este porcentaje no ha variado mucho en los últimos 10 años, la cifra ha aumentado en 350.000 personas. Del total, más de 850.000 tienen 80 o más años y la gran mayoría son mujeres, 662.000.
- PERSONAS SIN DESCENDENCIA
Actualmente hay un 12% de mujeres nacidas en la década de los 40, que no tuvieron hijos. Las proyecciones muestran que esta tendencia ha ido aumentando y alcanza el 25% en el caso de las mujeres nacidas en la primera mitad de los 70. Envejecer sin hijos y en situación de fragilidad o dependencia aboca a recurrir a otras redes personales, o recursos externos para atender necesidades de cuidados, incluso en fases más tempranas como la prefragilidad, o para tareas que simplemente cuesta hacer: porque hay que subirse a una escalera alta, por peso, etc. Esta misma situación se va a dar en las personas que aun teniendo descendencia esta no resida en su proximidad. Algo cada vez más común. Antes o después los cuidados de mayores se van a “desfamiliarizar”.
- DEPENDENCIA SENIOR
El Plan de Choque en Dependencia 2021-2023 cifró en 6.260.355 las personas potencialmente dependientes en España. Esta cifra incluye a todos los mayores de 80 años dentro del colectivo, y parcialmente a quienes se encuentran entre 65 y 79 años.
En 2021 había 1.400.000 [1] personas mayores de 65 años dependientes o que han solicitado su valoración de dependencia [2], que necesitaban apoyos de mayor o menor intensidad para desarrollar las actividades básicas de la vida diaria [3]. Casi un millón, el 71%, mayores de 80 años.
Según fuentes del sector el coste de atender a personas en situación de dependencia en nuestro país asciende hasta los 32.000 millones de euros, pero el PIB solo recoge 7.000 millones. ¿Dónde está la diferencia?
- COBERTURA PUBLICA DE LOS CUIDADOS EN EL HOGAR
El presupuesto destinado en 2019 a cuidados de larga duración (incluida asistencia sanitaria y social) era del 0,9% del PIB, por debajo de la media de los países de la OCDE.
La ayuda a domicilio específicamente ofrecida desde el Sistema público de atención a la dependencia se situaba en el 2019 en el 17,7% de todas sus prestaciones.
La dedicación media de los SAD (los servicios públicos de atención a la dependencia) es de 33,6 h./mes, esto es 1,5h/día de lunes a viernes. En el caso de personas con dependencia de grado III aumenta hasta 2,5 horas al día.
Los cuidadores no-profesionales adscritos al convenio especial (familiares que convivan con la persona dependiente y se hagan cargo de su asistencia) ascendían en la fecha de este informe a 67.000 (7,6% de los beneficiarios de prestaciones).
El gasto público anual promedio por persona dependiente atendido se situó en 2021 en España en los 8.196 €.
Como se aprecia, el principal problema del sistema español reside en su escasa financiación, cuyo mayor esfuerzo (la diferencia que no recoge el PIB) recae en manos de los propios mayores y sus familias.
- LISTAS DE ESPERA
El 63% del total de personas con dependencia reconocida (884.000) eran beneficiarias de alguna prestación, por lo tanto 516.000 no lo eran. Además, hay un 14% de personas reconocidas con derecho a prestaciones que no la reciben [4], en la jerga profesional se dice que están “en el limbo”.
En los últimos 10 años unas 100.000 personas de media solicitan valoración de dependencia. A pesar de los intentos de los diferentes agentes involucrados se mantiene una lista de espera de valoración de dependencia que afecta a algo más de 120.000 personas anualmente. El 80% será dictaminado con algún grado y puede que con alguna prestación. El 20% restante no obtiene ningún grado, y, en consecuencia, ninguna prestación.
Tanto las personas que están “en el limbo”, o quienes están en espera de valoración, como las que no alcanzan ningún grado comparten una situación de necesidad de atención, que seguramente es muy diferente, y requerirá respuestas también acordes a su situación.
- EL IMPACTO DE LA CRISIS ECONOMICA EN LOS CUIDADOS
La crisis financiera se inició en 2008, y alcanzó su pico en España en 2013. Según la Encuesta de Presupuestos Familiares, el gasto del capítulo “servicio doméstico” en 2013, donde se encuadran la mayoría de estos servicios, se había reducido en un 27,17%. En 2019 se había alcanzado el 85% del gasto previo a la crisis. En este periodo, este capítulo había reducido su peso del 1,46% de los gastos de los hogares al 1,23%. En términos de afiliados a la seguridad social su impacto ha pasado de casi 598.625 personas afiliadas, en el pico de 2012, a 438.029 en 2019, esto es una caída del 26% (según datos del SEPE). Se podría pensar que ha habido un trasvase hacia los servicios públicos SAAD, pero sus cifras de empleabilidad, aunque son más estables que el mercado privado en el periodo de crisis, no aumentan significativamente. A este respecto hay que tener en cuenta el aumento de la modalidad de copago de los servicios SAAD públicos que, entre 2009 y 2019, han pasado del 14,7% al 20,7%.
Teniendo en cuenta el escenario de crecimiento de la demanda de cuidados (las proyecciones estiman que el gasto en cuidados se duplicará o incluso triplicará de aquí a 2050), los datos actuales nos están hablando de una contención de los gastos en este capítulo, y de cómo se está recurriendo a soluciones basadas en el ahorro de costes, desde mayor involucración familiar, reducción de horas, economía sumergida, desatención, etc. Se requieren soluciones coste-eficientes y también versiones muy accesibles.
- ECONOMIA SUMERGIDA DE LOS CUIDADOS
Se estima, como mínimo, un 30% el alcance de la economía sumergida de los cuidados. O lo que es lo mismo unas 200.000 contrataciones que no cotizan a la seguridad social, que podrían suponer más de 800 millones de euros en cotizaciones. “Se necesita más regulación y proteger mejor a los usuarios y las familias”, reclamaba Nerea Amenabar de Ubikare, y disponer de medidas como el “Credit Impôt” (como explica Adrià Buzón, de Cuideo) que en Francia han tenido un gran éxito contrarrestando estas prácticas y dignificando la profesión.
- INTEGRAR LA TELEASISTENCIA Y LA ATENCION PERSONAL
La teleasistencia actúa ya en sus diferentes modos y dispositivos para facilitar el acompañamiento tanto en el hogar (TAD) como fuera de él (TAM: teleasistencia móvil). Inicialmente fue con botones colgantes, y ahora con objetos más amigables, pulseras, cinturones, relojes, tabletas, que se acompañan por una gran variedad de servicios, GPS, alertas o prevención ante caídas, monitorización de actividad, avisos, formación, conversación, etc.
Es el servicio estrella de los planes de dependencia, casi 800.000 usuarios atendidos (2020), y seguramente una de las opciones con más futuro, porque empodera al usuario, haciéndole partícipe de sus cuidados, mientras vive en su domicilio, con un coste reducido frente a los servicios personales. La evolución de los operadores del sector apunta al desarrollo de una teleasistencia avanzada, predictiva, con integración de video atención, que además recoja y comparta datos con agentes los agentes sociosanitarios. En este sentido las plataformas que cuentan con tecnología específica están en una posición óptima para ofrecer un servicio integral y complementario, con costes de atención más accesibles.
- LA SALUD AL HOGAR (DIGITAL)
El acuerdo social es claro, el domicilio particular es el lugar más adecuado para la atención sanitaria (siempre que sea posible). En este marco se desarrolla nuevas modalidades remotas de prestación de servicios de salud, en auge tras la pandemia y, además, con el impulso del cambio proveniente de las proyecciones de costes crecientes del sistema sanitario, la digitalización de los servicios, las innovaciones de las tecnologías de la salud, o el aumento de la esperanza de vida.
El cambio demográfico afecta a los hospitales, la edad media de las personas hospitalizadas fue de 58 años y no para de crecer, urge un cambio, llevar los cuidados al hogar del paciente y no al contrario. En este contexto surgen tendencias como los Home-Spitals (concepto acuñado por el Foro Económico), que integra “hogar” y “hospital”, que se hacen patente en algunos casos que mostramos. Su objetivo, evitar que las personas mayores se vean obligadas a ingresar en un establecimiento sanitario para recibir una asistencia que podría prestarse en el hogar.
Para seguir leyendo los siguientes capítulos del monográfico sobre plataformas de cuidados clica en los enlaces (aunque se presentan en un cierto orden, te sugerimos que sigas tu propio criterio):
- Cuidados de personas mayores: Las Plataformas
- Cuidados de personas mayores ¿crecimiento o digitalización?
- Pero ¿qué aportan las plataformas de cuidados?
- Hablando con Adrià Buzón de CUIDEO
- Hablando con Claudia López de SENNIORS
- Hablando con Daniel Ibiza de AIUDO
- Hablando con Ernesto Bravo de FAMILIADOS
- Hablando con Nerea Amenabar de UBIKARE
- Hablando con Joaquín de los Reyes de MAPFRE
- Hablando con María Barco de ADIPER
- Como acortar la ruta desde el B2C al B2B
- Cuidados a domicilio, un poco de antecedentes
Ya lo sabes, si te quedas con ganas de saber más ponte en contacto con nosotros en este enlace.
[1] Dato inferior en 100.000 a las proyecciones del Libro Blanco sobre la atención a las personas en situación de dependencia en España (2005).
[2] Históricamente un 20% no alcanzan el grado I de dependencia.
[3] El 65,1% de las personas presentaron dificultades importantes de movilidad, el 64,5% tenía problemas relacionados con la vida doméstica y el 48,5% con el cuidado personal.
[4] El dato positivo es que en 2000 este porcentaje era del 34%.
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